QUICO VIZ

  SOMBRAS DE CRISTAL - Crónica de las horas viejas - -EL HOMBRE LOBO  Ya estamos acostumbrados; cuando no es el viento, es la lluvia y, si estalla la tormenta, tenemos apagón para varios días. Un relámpago, un trueno, y un apagón; algún rayo habrá dañado el tendido eléctrico. La abuela ha encendido velas y candiles; llevamos un buen rato al pie del fuego, espantando el frío y  sacando la humedad del cuerpo . E n uno de esos momentos de silencio en que la contemplación crea ensimismamiento y uno no es consciente ni del ruido  de la tormenta, como empujada por un golpe de  aire se abrió la puerta en el instante en que  el destello de un relámpago dibujaba en el quicio la sombra  enjuta del abuelo que, sin decir palabra, entra, cuelga la empapada zamarra, saca su navaja, corta dos rebanadas de pan, y varias lonchas de tocino que clava en una varilla de alambre para poner al fuego de la “lareira”.           - Abuelo… ¿qué es un “lobishome”?. Mientras asa sus torreznos, sin levantar la mi

MAR DE SOÑOS  -Pegadas na aréa- ------------- Abrín os ollos  e atopei ó meu lado á unha muller que me amaba,   e antes de que rematara o meu tempo de soñar   decidín convertela a ela no meu soño…     Abrí los ojos      y descubrí a mi lado a una mujer que me amaba,      y antes de que se acabara mi tiempo de soñar      decidí convertirla a ella en mi sueño... ------------- Cada vez que ós ollos te miro   ata a túa alma voa a miña alma,  e cada vez que os teus ollos me miran,  nas túas miradas se asoma e me chama...       Cada vez que a los ojos te miro      hacia tu alma vuela mi alma,       y cada vez que tus ojos me miran,      en tus miradas se asoma y me llama...         ------------- N on teño barcos pa viaxar polos mares;  tan só teño unha gamela  coa que tódolos días  navego  polos recantos  dun mar de soños,  tan grande,  que toda unha vida non chega  pa describir cada instante...      No tengo barcos para viajar por los mares;      t an solo tengo una gamela      con la que t